La mirada integral y estratégica del negocio es clave para poder definir un plan de trabajo que nos acerque al cumplimiento de los objetivos que nos proponemos para alcanzar la meta. El ejercicio de ir transitando lo micro y lo macro simultáneamente con una mirada 360 del negocio es lo que nos permite minimizar riesgos y generar nuevas oportunidades de negocio. Check list – Feedback – Follow up permanente son fundamentales a la hora de los ajustes necesarios para achicar los costos de aprendizajes.

El buen ejercicio de las relaciones públicas y el relacionamiento estratégico con cada uno de nuestros públicos o grupos de interés, teniendo en cuenta que es lo que quiere cada uno, nos asegura abrir oportunidades de diálogo efectivo, para llegar juntos al objetivo que nos propusimos inicialmente.

Estoy convencida que la mejor manera de avanzar rápido y bien en un proyecto es generando los acuerdos necesarios con el equipo de trabajo para coordinar y liderar desde el consenso colectivo. 

La escucha activa para entender las necesidades de nuestros clientes es fundamental a la hora de sumarnos como equipo externo.